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Abril 2019 | RSC y Desarrollo Sostenible
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La misión de FEGRADI, conseguir la pena inclusión de las personas con discapacidad física y/u orgánica
 
 
 
 
Marta Castillo, presidenta de Fegradi: “El día que las personas con discapacidad salgamos a la calle y logremos no pensar en nuestra circunstancia, estaremos en sociedades verdaderamente igualitarias”
Desde finales de los años 70 y principios de los 80, la Federación Granadina de Personas con Discapacidad Física y Orgánica, FEGRADI COCEMFE Granada, desempeña su encomiable e ingente actividad, como organización sin ánimo de lucro, declarada de utilidad pública, y que representa a todas las personas con discapacidad física y/u orgánica de Granada y su provincia, a través de sus asociaciones miembro. Mantenemos una charla con su presidenta, Marta Castillo, que nos habla de la misión de FEGRADI para conseguir la pena inclusión de las personas con discapacidad física y/u orgánica en la sociedad mediante la representación, promoción y defensa de sus derechos.
TextoFegradi representa e impulsa al Movimiento Asociativo de Personas con Discapacidad Física y Orgánica, a la vez que desarrolla una serie de servicios y actividades orientadas a sus organizaciones miembro con la intención de mejorar la calidad de vida, la plena integración en la sociedad y la defensa de los derechos de las Personas con Discapacidad Física y Orgánica en todos los ámbitos de la vida.
¿Cuándo y por qué nace Fegradi como una Federación de asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica?
A finales de los años 70 y principios de los 80, comienza a crearse un importante movimiento asociativo con y de personas que presentan una misma patología. Se crean estas asociaciones para tratar de cubrir y dar respuesta a necesidades y expectativas que no ofrece la administración pública. Cuando hay un número importante de asociaciones de personas con discapacidad en Granada, surge la necesidad de crear otra figura que represente a todo el tejido asociativo y que haga las veces de interlocutor. Justo en este punto es en el que nace FEGRADI, como la voz y el interlocutor de todas las asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica de Granada.
Como Federación de asociaciones, a día de hoy, forman parte de la red de Fegradi, unas 38 asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica, con sede en toda la provincia de Granada. Un amplio espectro de patologías está representado en Fegradi, gracias a los numerosos colectivos sin ánimo de lucro que velan por sus intereses y por su calidad de vida. Colectivos específicos como las mujeres con discapacidad o jóvenes con discapacidad también tienen su espacio de representación en Fegradi.
¿Qué inspira la creación de Fegradi?
Nace con el fin de mediar y agilizar las conversaciones entre la Administración y las asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica de Granada; y siempre con el fin de incidir en la calidad de vida de todas las personas con necesidades especiales y de todo el colectivo. Naturalmente, cada asociación trabaja bajo sus propios criterios, principios y necesidades, cada patología de su especialización. Fegradi trabaja por cuestiones generales y vitales como la accesibilidad, la inclusión, el empleo, las mujeres con discapacidad, la salud, la educación, etc.
Fegradi acaba de cumplir 30 años y lo hace con gran solvencia económica y con una plantilla compuesta por medio centenar de personas, así como un centro especial de empleo y otros ocupacional, concebidos como organizaciones, en la que el 75% de su plantilla tiene algún grado de discapacidad. Actualmente, unas 100 personas integran la totalidad de los recursos humanos con lo que cuenta Fegradi.
¿Cuáles son las principales causas de su reivindicación?
Aspiramos a crear, en definitiva, un colectivo con funciones políticas que represente y vele por la calidad de vida y el bienestar de las personas con discapacidad física y orgánica. Desde que empezó su actividad hace ahora 30 años, reivindica los derechos de las personas con discapacidad. Y lo hace en un doble sentido: que se cumpla lo estipulado con la adquisición de nuestros derechos; y que se reconozcan nuevos derechos que aún no hemos conseguido y por los que tenemos que seguir luchando. Sin ir más lejos, hablamos de derechos como la accesibilidad, donde estamos evidenciando un claro incumplimiento de la normativa que obliga a la accesibilidad de los espacios. La normativa se está incumpliendo y, mientras siga así, tenemos que seguir reivindicando el cumplimiento, como mínimo, de los imperativos legislativos.
Otra de nuestros “frentes de batalla” es el de la educación para que los niños y niñas con discapacidad reciban la atención que necesitan. Hay muchos niños y niñas con discapacidad que, sin ir más lejos, necesitan el apoyo de una figura “sanitaria” que les preste la atención y los cuidados que necesitan en los propios centros escolares, en un tiempo concreto; y esa figura no existe. Y como no existe, muchos padres y madres tienen que abandonar sus trabajos para atender a sus hijos y proveerles los cuidados y la atención que demandan.
Hablemos del empleo y la empleabilidad para personas con discapacidad física y orgánica… Otro de nuestros campos de actuación es el empleo, como garante de autonomía, inclusión y verdadera integración. Que las personas con discapacidad accedan al mercado laboral significa que aportan a la sociedad, que cotizan a la seguridad social y que pagan sus impuestos; en lugar de ser personas que reciben una pensión. Hay un cambio de mentalidad importante y un cambio de concepto. No es lo mismo ser una persona que recibe que ser una persona que aporta a la sociedad con su trabajo, igual que el resto de las personas. En este sentido, luchamos para que los principios de integración laboral de personas con discapacidad se cumplan en la empresa privada y en la organización pública. Se trata de cumplir con los porcentajes estipulados y de cumplir con lo previsto en la normativa.
Trabajamos también intensamente, de cara a la empleabilidad, campañas de concienciación y divulgación para tratar de eliminar los prejuicios asociados a personas con discapacidad y el miedo a su contratación. En la mayoría de los casos, solo se requiere la adaptación de los puestos de trabajo para favorecer un entorno laboral adecuado y acorde con las necesidades de las personas.
El área de empleo de Fegradi cuenta con un equipo especializado, formado por técnicos de orientación e intermediación laboral, y el equipo del Centro Especial de Empleo. De mano de organismos como la Junta de Andalucía o La Caixa, participamos, en programas especiales de empleo que inciden en la “empleabilidad” y planes formativos para nuestros usuarios.
¿Cuáles son las principales líneas de actuación de la Asociación?
Como decía, Fegradi cuenta con un centro de día y un centro ocupacional, en los que unas 40 personas son discapacitadas física u orgánica. La mayoría de las personas del centro de día han sufrido un ictus. Los usuarios con esta patología, durante su ingreso hospitalario, reciben terapia y rehabilitación. No así cuando reciben el alta clínica. Para estos usuarios, la rehabilitación es clave y de ella, depende gran parte del éxito de su recuperación. En el centro de día de Fegradi, se les ofrece este tipo de tratamientos y procesos rehabilitadores. De igual forma, reciben terapia cognitiva y ocupacional.
Por su parte, al centro ocupacional asisten generalmente personas jóvenes, con dificultades para acceder al mercado laboral, por su propia discapacidad o por otro tipo de factores personales o sociales. Y son, sin embargo, personas que quieren mantenerse ocupadas. Al centro, asisten a diario, para participar en talleres en los que adquieren habilidades para desarrollar productos que, luego, venden en centros universitarios, mercadillos, etc. Es una forma en la que consiguen una cantidad económica que les permite sufragar parte de sus gastos, a la par que se siente útiles.
Los usuarios participan en todas las actividades deportivas y culturales ofertadas por Fegradi, que cuenta también con un servicio de transporte propio, con 17 vehículos adaptados, que facilita la movilidad de los usuarios. Lo que comenzó como fórmula de transporte escolar y universitario, se ha convertido en un servicio individualizado para los usuarios y para las asociaciones que integran Fegradi.
Ocio, deporte y tiempo libre es otra de nuestras áreas de actuación. Desde este ámbito, se organizan actividades inclusivas y accesibles, tratando de acercar siempre a nuestros usuarios, una oferta amplia que incida en su calidad de vida y en su bienestar. Tratamos de participar en actividades como personas sin discapacidad, y que la discapacidad no sea un ápice para desarrollar una vida plena.
El voluntariado es otro de los elementos cruciales para Fegradi. En muchos casos, de la labor del voluntariado, depende que podamos desarrollar muchas de nuestras actividades cotidianas. De la misma forma en que lo es nuestra área social desde la que articulamos los mecanismos para concurrir en procesos de convocatoria en los que pueda participar Fegradi.
¿Qué papel desempeña la educación?
Entendemos la educación como otro de nuestros ámbitos de especialización y que desempeña, además, un papel determinante. Trabajamos campañas de concienciación, sensibilización y divulgación en centros escolares y con los escolares, sobre la discapacidad. Son programas que trabajamos desde nuestra asociación estatal. Dispensamos también formación al profesorado para que adquieren ciertas capacidades y habilidades para trabajar con niños con discapacidad.
¿Considera que existen aún muchas resistencias sociales para avanzar hacia la inclusión de las personas? ¿O considera que la sociedad avanza a buen ritmo?
Si bien es cierto que ha habido un gran avance, también es cierto que, a día de hoy, seguimos encontrando muchísimas resistencias. La sociedad del siglo XXI no es la sociedad del siglo pasado o siquiera de primeros del siglo XXI. Pero siguen existiendo miedos y prejuicios alrededor de la discapacidad que tienen que ver con el desconocimiento. Es un círculo vicioso porque el desconocimiento genera miedo y rechazo. Nosotros defendemos la normalización y la integración. En este sentido, quiero subrayar que las mujeres con discapacidad sufrimos una doble discriminación. Queda mucho camino por recorrer. Y para eso, tenemos que educar a la propia sociedad para avanzar en el respeto de nuestras necesidades especiales. Que se respeten y se promuevan los espacios inclusivos y adaptados, que se respeten las plazas de estacionamiento para personas con movilidad reducida, que podamos disfrutar, como el resto, de espacios accesibles y de las mismas oportunidades. El día que las personas con discapacidad salgamos a la calle y logremos no pensar en nuestra circunstancia, estaremos en sociedades verdaderamente igualitarias.
¿Integra Fegradi, principios de RSC (Responsabilidad Social Corporativa) en su gestión?
Tanto Fegradi como las asociaciones sin ánimo de lucro, tenemos integrada la RSC en nuestro ADN. Hemos hecho responsabilidad social corporativa desde nuestros orígenes porque trabajamos por y para la sociedad. Somos los primeros que cumplimos con la normativa relacionada con la diversidad y la inclusión. De la misma forma en que trabajamos tomando en consideración el medioambiente. Entendemos y apoyamos que el tejido empresarial cuente con departamentos específicos que integren principios social y medioambientalmente respetuosos porque es una forma de avanzar por buen camino. De la misma forma, consideramos que la Agenda 2030 representa una hoja de ruta hacia la sostenibilidad adecuada para que todos los agentes -públicos, privados y sin ánimo de lucro- avancen en un mismo sentido.
Próximos pasos -visión a futuro de la Asociación-
En los próximos años, aspiramos a convertirnos en una entidad de referencia para el tejido asociativo y para el tejido empresarial. Trabajamos por una verdadera inclusión, autonomía e independencia de las personas con discapacidad. Que cada uno de nosotros y de nosotras encontremos nuestro sitio en la sociedad, conforme a nuestras propias capacidades y habilidades.